Una hidratación adecuada es esencial para ayudar a nuestro cuerpo, desde estimular el cerebro hasta disminuir el riesgo de insuficiencia cardiovascular, pero ¿sabías que también puede ayudar en las etapas de curación de una herida?
La falta de hidratación o una hidratación inadecuada detendrá la migración celular, disminuirá la oxigenación de la sangre y retrasará enormemente el proceso de tratamiento de las heridas post cirugía.
Aquí hay algunas razones por las que la hidratación es una parte crucial en el cuidado de las heridas para que tengas un postoperatorio seguro.
Impacto de la hidratación en la cicatrización de heridas
Cuando tu cuerpo no recibe la cantidad de líquidos que necesita, pueden surgir varias anomalías que afectan las heridas resultantes de una cirugía. Tales anomalías pueden incluir una pobre perfusión de oxígeno, nutrientes esenciales que no llegan a la superficie de las heridas y un drenaje ineficiente de las mismas.
El agua es la principal forma en que el oxígeno y los nutrientes llegan directamente a las heridas, y la deshidratación es una de las razones más comunes por las que se interrumpe la función celular.
Esencialmente, la falta de líquidos crea retrasos en casi todos los aspectos de la cicatrización de una herida. Y si una lesión no mantiene la humedad adecuada, las células epiteliales que trabajan para reparar el tejido no podrán cubrir las heridas a un ritmo normal.
Hidratación después de una cirugía
Es absolutamente esencial mantenerse completamente hidratado después de una cirugía. Esto se hace para evitar posibles complicaciones quirúrgicas, incluida la trombosis venosa, que es un coágulo que se acumula en las venas principales de los muslos y las piernas. También, como paciente, puedes sufrir de embolia pulmonar.
Después de una cirugía, tu sistema inmunológico está extremadamente débil, lo que aumenta las posibilidades de una infección. El agua ayuda a mantener alejadas estas infecciones y actúa como un catalizador para tu recuperación. Además, el agua ayuda al cuerpo a deshacerse de las toxinas de la anestesia. Por lo tanto, el agua potable después de la cirugía puede ser muy útil en todos los aspectos de la recuperación.
Aunque las reglas sobre la forma correcta de tomar líquidos antes y después de una cirugía han sido bastante estrictas durante años, los médicos de hoy en día son cada vez más indulgentes con respecto a las reglas de ayuno preoperatorio.
Ciertos estudios han sugerido que es mejor beber agua antes de una cirugía. Puede ser más fácil para el paciente recuperarse de la cirugía en sí. De cualquier manera, tu médico es la persona adecuada para aconsejarte sobre el consumo de agua antes y después de tu cirugía.
En Recovery te ofrecemos excelentes servicios para que puedas llevar a cabo un postoperatorio seguro.
